
No me parece justo por mi parte escribir hoy acerca de este gran jugador de basket. Hoy que ya vemos los titulares deportivos a nuestro Pau con su segundo anillo.
Este hombre lleva años haciéndonos vibrar con su juego, y con su saber “estar” como persona.
Atrás quedó Fernando Martín, el primer español que fue a la liga de baloncesto más fuerte del mundo. Él abrió el camino para todos los españoles que por allí han pasado, y pasarán. Pero sinceramente, nadie le ha llegado a Gasol a la suela de los zapatos.
Este tío parece un yanqui más en la cancha. Un negrazo de esos que parecen locomotoras, solo que con un juego de pies y una movilidad única, que le hace uno de los grandes de ese deporte que tanto me apasiona.
Y luego está su personalidad. Como todos los grandes deportistas es un tío sencillo, que siendo catalán, ha defendido la selección como un jabato, y nunca se le ha visto ni una pizca de nacionalista. Realmente la mayoría de esas polémicas las generan los políticos, y no el catalán de a pie.
Y qué alegría me dio cuándo fue a los Lakers. ¡Nuestro equipo de cuándo éramos chavales!, ¿eh Adolfo?. Nosotros veíamos la NBA cuándo la daban la madrugada del viernes al sábado, en La 2, con ese super comentarista que era Ramón Trecet. Luego entre semana, a la cancha a intentar imitar a esos monstruos. Aún recuerdo a los jugadores de aquellos años: Magic, Jabbar, James Worthy, Scott…¡Cuánto me gustaba el baloncesto!, pero mis tobillos no resistieron el envite. Seguro que este verano organizamos un partidillo entre amigos. El año pasado pocos salimos ilesos, pero ahí estuvimos…
Y lo grande que se ha hecho nuestro baloncesto. La selección española es un ejemplo a seguir para esos jóvenes que se están entrenando, que están empezando. Pedazo de jugadores tenemos, es emocionante.
Y no, no me parece justo haberle dedicado hoy estas letras al Mr. Gasol, porque no es de ahora lo grande que es como deportista y como persona. Aunque nunca es tarde, si la dicha es buena.
Este hombre lleva años haciéndonos vibrar con su juego, y con su saber “estar” como persona.
Atrás quedó Fernando Martín, el primer español que fue a la liga de baloncesto más fuerte del mundo. Él abrió el camino para todos los españoles que por allí han pasado, y pasarán. Pero sinceramente, nadie le ha llegado a Gasol a la suela de los zapatos.
Este tío parece un yanqui más en la cancha. Un negrazo de esos que parecen locomotoras, solo que con un juego de pies y una movilidad única, que le hace uno de los grandes de ese deporte que tanto me apasiona.
Y luego está su personalidad. Como todos los grandes deportistas es un tío sencillo, que siendo catalán, ha defendido la selección como un jabato, y nunca se le ha visto ni una pizca de nacionalista. Realmente la mayoría de esas polémicas las generan los políticos, y no el catalán de a pie.
Y qué alegría me dio cuándo fue a los Lakers. ¡Nuestro equipo de cuándo éramos chavales!, ¿eh Adolfo?. Nosotros veíamos la NBA cuándo la daban la madrugada del viernes al sábado, en La 2, con ese super comentarista que era Ramón Trecet. Luego entre semana, a la cancha a intentar imitar a esos monstruos. Aún recuerdo a los jugadores de aquellos años: Magic, Jabbar, James Worthy, Scott…¡Cuánto me gustaba el baloncesto!, pero mis tobillos no resistieron el envite. Seguro que este verano organizamos un partidillo entre amigos. El año pasado pocos salimos ilesos, pero ahí estuvimos…
Y lo grande que se ha hecho nuestro baloncesto. La selección española es un ejemplo a seguir para esos jóvenes que se están entrenando, que están empezando. Pedazo de jugadores tenemos, es emocionante.
Y no, no me parece justo haberle dedicado hoy estas letras al Mr. Gasol, porque no es de ahora lo grande que es como deportista y como persona. Aunque nunca es tarde, si la dicha es buena.
Es muy grande, tanto como en su dia lo fue Indurain, pero tendran que pasar años pàra que nos demos cuenta de lo que este pedazo de jugador a conseguido...... y lo que le queda.
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